Dos años después del reboot de uno de los personajes más populares del cómic de súper héroes, nos llega, al menos para mi, la esperada segunda parte.
La anterior cinta dividió bastante al fandom, a mi particularmente me pareció una muy buena adaptaciones de los conceptos básicos del personaje arácnido de Marvel.
En esta ocasión, se ha hecho un film que continua y amplia los puntos fuertes del film de 2012, y corrige defectos clave, haciendo en consecuencia un film mucho más redondo.
En esta segunda entrega se ahonda en la responsabilidad que se autoimpone Peter. Él acepta que es Spider-man y cada vez está más cómodo con esa parte de su vida, pero no sabe cual es la mejor manera de combinarla con su vida personal, que irremediablemente se va acabar juntando debido a la aparición de su viejo amigo de la infancia, Harry Osborn y la dificultad que le supone cumplir la promesa que le hizo al Capitán Stacy, ya que no podría estar más enamorado de Gwen Stacy.
A nivel de dirección se han tomado muy buenos apuntes, siendo este punto uno de los más reforzados. Obviamente no hablamos de una dirección como pueden ser las de la trilogía del Caballero Oscuro.
Pero en este sentido no tenemos ninguna escena que pueda hacernos llevar las manos a la cabeza. En definitiva una dirección "clásica" de genero súper heroico. Las escenas de acción están muy bien llevadas y no nos da la sensación de estar viendo un videojuego, uno de los peligros de este tipo de cintas.
Marc Webb vuelve a demostrar que las escenas románticas son las que mejor se le dan. Las que comparten ambos protagonistas del film. Cada fotograba en que aparecen juntos Andrew Garfield y Emma Stone es mágico. Ambos demuestran una química estupenda en pantalla, que rara vez parejas reales demuestran en un film.
Siendo todas las escenas más introspectivas algunas de las mejor rodadas.
Todas estás escenas atienden a una necesidad mayor que a la de tener una chica en la película. Ya que se puede asegurar que Amazing Spider-man 2, no sólo es una película sobre el trepamuros de Marvel, si no que funciona como un homenaje a Gwen Stacy. Personaje vital en la vida de Peter Parker que en muy pocas ocasiones se han atrevido a adaptar en proyectos audiovisuales de Spider-man.
Pero el gran acierto de este film es sin duda el guión elaborado por Roberto Orci y Alex Kurtzman, (creadores y guionistas de la serie Fringe). Quienes aparte de entender a la perfección al cabeza de red, saben aprovechar sus cartas y han trazado un excelente relato que junta a muchos personajes de la franquicia, dándoles los minutos que cada uno de ellos necesita, y cerrando perfectamente las tramas que esta entrega heredaba de su predecesora.
Así que el miedo que había de que se repitiera la formula de Spider-man 3, mucho personaje, mucho efectismo pero poco contenido, se queda desvanecido. Incluso se permiten el lujo de introducir a forma de caemos a varios personajes que podrían dar que hablar en el futuro de la saga.
A destacar varias escenas donde se demuestra que Spidey no sólo detiene a ladrones o a súper villanos, si no que aparte es "tu amistoso vecino". Emotiva la escena en la que salva a un niño de unos matones y muy divertidos los planos donde lo vemos cambiarse el traje lleno de plumas entre otras cosas.
Nada que objetar con pequeños cambios en el origen de Electro, cierto que le dan una apariencia en exceso Nerd, y un accidente que puede recordar al famoso descalabro de O.J. Simpson al inicio de Agárralo como puedas, pero luego le da un aspecto cogido de la linea Ultimate que visualmente funciona. Se continua la trama de la enfermedad de los Osborn de la primera película, que le da un origen estupendo a Harry y evita poner el traje clásico que funciona muy bien en cómic, pero que no cuela en pantalla.
Mucho que aplaudir en la concepción de Spider-man, quien eleva su estatus de bromista y explora su faceta de científico, sabiendo que la solución no siempre es liarse a puñetazos.
Y sobre todo, me gustaría destacar lo bien elaborado que está el final. Ya que se demuestra muy bien el tono del personaje. Que pese a todo lo que le ocurre a nuestro protagonista, la cinta termina con un tono muy optimista.
Respecto a otro de los fallos que comentaba antes de la primera entrega, la banda sonora es infinitamente superior. Hans Zimmer, quien hace equipo con The Magnificent Six, sorprende dando un tono muy distinto a lo que nos tiene acostumbrados. Sin llegar a ser de lo mejor que tiene, sí que me parece muy encomiable.
A nivel actoral un 10 a Andrew Garfield, quien ya demostró su buen hacer y sigue en la misma linea. Emma Stone continua siendo la gran roba escenas, siendo una de las mejores actuaciones femeninas que hemos visto dentro del genero de súper héroes.
Jamie Foxx cumple muy bien su rol como perdedor y hace creíble su conversión a villano. Así como Dane DeHaan, quien construye un Harry Osborn, muy distinto al de James Franco, quien le da mucho caché al personaje y no cae en sobreactuaciones ni excentrismos en su versión de Duende Verde.
Muy divertidas las breves aportaciones de Paul Giamatti tanto al inicio del film como al final. Y muy destacable la aportación de Sally Field como sufrida Tía May.
Una muy buena película de súper héroes, que adapta a la perfección el tono más clásico y querido del personaje emblema de Marvel.
Mi nota totalmente personal: 9.5/10
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